En una ocasión, un león se aproximó a un lago de aguas cristalinas para calmar su sed.
Al acercarse al agua, vio su rostro reflejado en ella y pensó:
-¡Vaya!, este lago debe ser de este león, tengo que tener mucho cuidado con él. -atemorizado, se retiró.
Pero, tenía tanta sed que, al rato, regresó de nuevo al lago, y allí estaba otra vez el “otro león”.
¿Qué podía hacer? La sed lo asfixiaba y no había otro lago cercano. Víctima del miedo, retrocedió de nuevo.
Horas después, volvió a intentarlo. Se acercó al agua, y abrió sus fauces de forma amenazadora, pero comprobó que el “otro león” hacía lo mismo. Sintió terror y salió corriendo nuevamente.
¡Era tanta la sed! que lo intentó varias veces más, pero siempre huía espantado.
Pasaban las horas y la sed era cada vez más intensa, de modo que tomó la firme decisión de beber agua del lago, sucediese lo que sucediese.
Así que armado de valor, se acercó al lago, y con decisión, metió su boca en el agua.
Y el “otro león”, ¡desapareció!
………
Muchos de nuestros temores son imaginarios. Sólo cuando nos enfrentamos a ellos desaparecen.
Ten valor, y hazles frente. No dejes que tus miedos imaginarios limiten tu vida.
…………..
¿Quieres leer y escuchar más cuentos y relatos para la reflexión? Aquí los tienes todos.